La temporada de playa está en pleno apogeo y el riesgo es algo noble, una pareja de enamorados no hizo nada malo, simplemente follaron apasionadamente por diversión en la playa. A veces es necesario cambiar de ambiente, o en casa o en una habitación de hotel, el sexo ya aburre y no interesa. Menos mal que no había otros turistas cerca y la joven pareja pudo disfrutar al máximo.
La pelirroja bien podría venir a trabajar completamente desnuda: ni la falda ni la blusa de sus encantos intentan siquiera ocultarlo. Así que no es de extrañar que el joven jefe acabara clavándole la polla en la mejilla. ¿Quién se resistiría, viendo esos pechos y ese culo en acceso casi abierto todos los días? Ni siquiera conozco a ningún hombre así, ¡y tampoco conozco a ninguna mujer que le guste!